Alberto Gabriel Soto Espinoza 21 años de edad, nacionalidad venezolano residenciado en la Araure Estado-Portuguesa, Venezuela.
"En enero del 2018 me fui de Venezuela, así como todos los venezolanos lo
estaban haciendo por la situación que estaba pasando el país. Me fui de
Acarigua (estado Portuguesa) hasta Táchira, que fue un viaje de aproximadamente
casi un día! Bueno llego a la frontera y me encuentro con la novedad que
estaban estafando mucho las personas por que en ese entonces estaban saliendo
muchos venezolanos y era muy fácil engañar a las personas y una de esas personas
fui yo.
Cuando yo estaba en la frontera, me encontraba con una persona (un guía de
una agencia de buses), yo le comento que ni mi novia ni yo habíamos sellado
pasaporte y que necesitábamos pasar rápido, pero el chico me dijo que tenía que
ser obligatoria sellar el pasaporte para yo poder andar tranquilo, bueno en fin
esa persona nos metió una psicología mala y claro con el afán de irme y no
regresar, yo decido preguntarle cuánto cuestan los pasajes para irme directo y
me dice 200 mil pesos y como éramos dos personas serian 400 mil pesos; bueno,
yo le doy 350 mil pesos y me dice que “faltaba dinero” y yo le digo que eso era
lo “único que tenía” y que no cargaba más dinero, bueno él chico me dice que “así
no podía” pero en fin, el chico me dice “dame tu teléfono y así estamos pagos”,
yo se lo doy y me dice que tocaba abordar el bus en el terminal de los patios y
que ese nos llevaba directo hasta Quito-Ecuador. El propio chico nos lleva
hasta el terminal y va hasta una taquilla y nos compra los boletos y nos dice que “tenemos que esperar el chico de
la taquilla nos llamaba cuando estuviera listo”, por otro lado el chico (guía)
nos dice que “el pasaje salió más económico” y me regresa 120 mil pesos y yo le
agradezco. Pasa un tiempo y voy hasta la taquilla de la agencia y el chico me
entra los tiquetes que van para “Medellín” y yo le agradezco, pero aun así me
entro la duda y le pregunte ¿por qué hasta Medellín? si era para Quito-Ecuador,
y el chico me dice que “esto era una agencia nacional, que solo salían buses
para los departamentos de Colombia”, yo en verdad me estrese, no tenía como
llamar a mi mamá, en verdad no tenía nada de dinero y pues tampoco me fui a
perseguir a el chico que me estafo y lo deje así.
Bueno mi novia y yo agarramos el bus para Medellín y en el transcurso del
viaje no comimos nada, porque lo único que cargaba eran 70 mil pesos. Llego a Medellín
y en ese transcurso que lo único que pensaba era que íbamos hacer para llegar
hasta Quito y lo otro fue hacer lo posible para llamar a mi mamá, le pido el favor
a mi novia que le pregunte a alguien si le podía prestar el celular para
llamar, y nos encontramos con un señor mayor y un chico de unos 16 años, bueno ellos
nos prestaron para yo poder comunicarme y resulta que ellos también iban para Guayaquil-Ecuador,
bueno en el transcurso del camino nos íbamos conociendo, ellos nos comentan que
también los habían estafado y pues que se dirigían a Guayaquil. En el todo ese tiempo
no habíamos comido nada porque no nos alcanzaba el dinero y teníamos que
guardar lo poco que cargábamos! Bueno en fin, tuvimos que caminar como una hora
hasta el terminal del sur, ósea nos encontrábamos en el lado norte. En todo el
camino nos estábamos conociendo con el señor y el chico y pues ya no éramos dos
sino cuatros; luego de caminar como una hora, llegamos al terminal y el señor
nos dice “yo los ayudo para que lleguen a ecuador para que por lo menos estén cerca
de alguien y no estén en la deriva”, yo le agradezco mucho a ese señor, porque
en verdad nadie tiene esa capacidad de ayudar a otro. Después de eso, nos
encontramos en la Puente internacional de Rumichaca donde llegamos eso de la 1
am y resulta que la frontera la habría a las 8 am para pasar a Ecuador. Bueno
en todo ese transcurso pudimos pasar a Ecuador y abordamos el bus que nos llevaría
para Quito.
Cuando llegamos pues me puse a trabajar vendiendo pasteles o tortas, en una
licorería, en restaurantes, entre muchas cosas más. Bueno ya gracias a dios
llevo 22 meses aquí en Ecuador y actualmente estoy trabajando en una pollera,
donde asan pollos y estoy muy bien gracias a dios y muy feliz ya que forme una familia."
Alberto Gabriel Soto Espinoza.